MODELOS: HUESO, Y CARNE.

 Dibujar el cuerpo humano desde el interior -esqueleto intrínseco- al exterior, denotando volumen, la gravedad, la propia corporalidad del cuerpo.

Nos pusieron un esqueleto en frente, de manera de representarlo, cada mesón tenía una diferente visión del "mismo" objeto.                                                                                                                                     

Empecé por el tronco para luego seguir con las demás partes del esqueleto (todo esto con una barra de grafito), sin ahondar en detalle, nada más las formas principales, ya luego iba decorando poco a poco, hasta que cambie de dureza y lo arruiné, calculé mal el grosor de la punta, y rallé por fuera de lo que tenía previsto. A decir verdad, o las piernas, o el tronco me pareció más corto de lo que visualmente se debería ver.

Luego llego Nury a sustituir el esqueleto- según fuentes asemeja el de una joven de 16 años-. Volviendo, a mi parecer la modelo no quedó de buena manera, pues veía todo su brazo, y el del esqueleto no, no le tomé importancia e intente trans-figurar la forma,  con carboncillo molido. Pasando de lo que fue el esqueleto, a lo que estaba viendo en ese momento. En esta segunda parte la importancia era darle corporalidad al cuerpo (previamente, esqueleto), y creo que en ese aspecto lo logré, pues se siente el peso de la carne, sobre el esqueleto.

Para terminar, espero seguir trabajando en el dibujo anatómico, pues tiene un enorme potencial expresivo, producto del mundo antropocéntrico en que nos desenvolvemos, la importancia del cuerpo. A partir de esto; se puede crear un discurso creador y destructor de paradigmas, a través de la propia representación del cuerpo. Aunque esto ya será más adelante, por ahora en expresión grafica me puedo limitar a la grafía, por la grafía.